Las herramientas y técnicas
ofrecidas por este programa,
que cuenta con el apoyo de
la Universidad Tecnológica
Nacional (UTN), ayudan al
fortalecimiento de la base
industrial, la minimización
del impacto ambiental de los
sistemas de producción y la
generación de empleo.
El Ministro de Medio
Ambiente aseguró que la
firma de este convenio “es
un gran avance de cara hacia
el objetivo de alcanzar una
ciudad sustentable”. Además,
sostuvo que “abre un espacio
de encuentro entre el
ambiente y la industria”. La
firma de este convenio es el
resultado de una serie de
intimaciones realizadas
meses atrás por el
Ministerio de Medio
Ambiente. Las empresas en
sus procesos producen
contaminación en cloacas y
cursos de agua, generando
malos olores.
Según el director del Centro
Tecnológico para la
Sustentabilidad dependiente
de la UTN, “este programa,
implementado gracias a la
decisión política de la
Ciudad, coloca a la Ciudad
en un nivel de vanguardia”.
A partir de ahora, las
empresas tendrán 60 días
para elaborar un cronograma
de actividades y presentar
un plan de trabajo, que será
auditado por el Gobierno
porteño y la UTN.
La implementación de Buenos
Aires Produce más Limpio se
divide en tres fases: la
Evaluativa, de
Implementación, y de
Evaluación y Monitoreo. La
primera consiste en el
análisis, diagnóstico y
generación de propuestas de
acción, con el fin, de
prevenir, minimizar o
eliminar eventos de
contaminación e ineficiencia
productiva. Durante la fase
de Implementación se
incorporarán las medidas
desde el punto de visa
tecnológico, de recursos y
negocios, para prevenir y
minimizar la contaminación.
Y por último, la fase de
Evaluación y Monitoreo
consiste en el seguimiento
del plan de trabajo,
mediante auditorias
documentales, presenciales,
y seminario.
Esta iniciativa está
dirigida a representantes de
empresas industriales,
comerciales y de servicios
radicadas en la Ciudad de
Buenos Aires.
La producción más limpia es
una estrategia mundialmente
reconocida que permite
incrementar la eficiencia en
el uso de recursos y mejorar
los procesos productivos.
Implica no sólo un control
en la elaboración de los
productos y servicios, sino
además un cambio en la
cultura industrial
existente.