PLAN DE AHORRO
DE ENERGÍA
Buenos Aires
a media luz
10/01/2008
- El
Ministro de Ambiente y Espacio Público porteño, Juan Pablo
Piccardo, anunció una serie de medidas tendientes a sumar a
nuestra jurisdicción en el plan de uso racional de la
energía eléctrica anunciado por el ejecutivo nacional. De
esta manera muchos de los monumentos, fuentes y luminarias
de ornamentación que lucen en los edificios públicos serán
reducidas o directamente apagadas. También se controlará (al
menos eso es lo que se anunció) que los aire acondicionados
de las oficinas públicas estén graduados en 24 ºC. También
se recomienda el apagado de computadoras y monitores que no
estén en uso.
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Las luces del
Obelisco se apagarán a partir de las 23 hs. Lo mismo
ocurrirá con las fuentes y monumentos de las plazas, siempre
que exista técnicamente la posibilidad de dejar sin energía
esos circuitos sin provocar una merma en la iluminación del
espacio público lindante. La seguridad no se vería de tal
forma afectada. |
También se recomienda el
apagado de las luces de
oficinas y despachos, así
como de computadoras y demás
aparatos electrónicos, al
término de la jornada
laboral y luego de
realizadas las tareas de
limpieza general.
Las medidas anunciadas
por el ejecutivo porteño están en concordancia con el plan
de ahorro energético propiciado por las autoridades
nacionales.
Pareciera paradójico,
sin embargo, que el estado nacional le pida ayuda y
colaboración a los usuarios para que el sistema no colapse,
cuando lo lógico hubiese sido realizar las obras de
infraestructura necesarias como para que la generación y el
transporte de la energía estuvieran acorde con el consumo
creciente. En invierno falta gas y en verano escasea la luz.
No parece difícil de pronosticar el momento cíclico del
próximo colapso.
O se hacen obras, o se
trabaja seriamente para educar en el consumo. O mejor, se
hacen obras y se educa en el consumo. Es difícil seguir el
tren de desarrollo tecnológico con que la sociedad actual se
maneja sin contar con una fuente energética adecuada (en
cuanto a potencia y a perdurabilidad). Las fuentes de
energía más usadas tienden a no ser renovables o a
contaminar el medio ambiente, mientras que las energías
"verdes" no parecen ser aplicables al sostenimiento de una
sociedad que cada vez consume con mayor voracidad.
Ayer movimos nuestro
huso horario, hoy cambiamos las lamparitas incandescentes
por las de bajo consumo, mañana apagaremos las luces del
obelisco, ¿que seguirá después?. Las luciérnagas, por las
dudas, se han alejado de las oficinas del poder...
Carlos Davis