Resultará por lo tanto de
interés contextual el
reproducir algunos párrafos
extractados de un trabajo de
reconstrucción de la
historia barrial
reproducidos en un boletín
de la Asamblea Barrial de
Floresta de mayo del 2005:
El Corralón Municipal y el
barrio
Algunos recuerdan su olor.
Si bien la basura que
juntaban las chatas era
llevada directo al bajo
Flores (en donde estaba la
quema), algunos residuos
quedaban y fermentaban. Por
tal motivo es que todos los
días manguereaban los carros
y el piso del corralón. Para
algunos esto demostraba
limpieza y afirmaban que no
había malos olores, mientras
que para otros era una tarea
que se hacía en forma
incompleta y superficial.
¿Lugar insalubre?. Quizá,
aunque para el barrio el
corralón era un negocio ya
que muchos de los que allí
trabajaban habían alquilado
su vivienda en las
inmediaciones (sobre la
calle Mercedes y también
sobre Gualeguaychú) y esto
redundaba en un movimiento
comercial de los negocios de
la zona.
Eran épocas en que el arroyo
Maldonado (hoy Av. Juan B.
Justo) inundaba la zona.
Allí el corralón cobraba un
protagonismo solidario,
ayudando a la evacuación y
albergando a los inundados.
Y cuando el carro de algún
vecino caía al arroyo, los
caballos cuarteadores del
corralón también tiraban de
la soga para colaborar con
el rescate...
La importancia que este
predio tuvo y tiene para la
comunidad de Floresta se
reconoce por el ahínco con
que los vecinos lucharon
para recuperarlo como
espacio público (nuestro, de
todos), como centro
educativo y como polo
cultural.
¿Qué pasa hoy en El
Corralón?
Actos de vandalismo
provocaron grandes pérdidas
para los diversos grupos
culturales que allí tienen
su cede, entre ellos el
laboratorio de arqueología
urbana que depende de la UBA.
Estos actos crecieron al
efectivizarse el retiro de
la guardia que la Policía
Federal había dispuesto en
el lugar en el que funciona,
no sólo la escuela media
Larroque, sino también
varios talleres artísticos y
culturales.
Por tal motivo los vecinos
realizaron la denuncia
correspondiente en la
Comisaría 43º al tiempo que
solicitaron (sin éxito) la
restitución de la guardia
apuntada.
Ante esta situación, la
Asamblea de Floresta junto
con Organizaciones
culturales y científicas del
Corralón, se reúnen esta
tarde (17 hs) con el fin de
sintetizar lo ocurrido y
para definir un plan de
acción que defienda este
espacio público y asegure su
destino de plaza cultural.
Carlos Davis
Fuente:
Prensa Asamblea Barrial de Floresta - Notas de archivo propio