Corrían los primeros años del siglo XX y el país inicia en forma gradual una etapa de creciente industrialización. Esto origina en primera instancia la necesidad de crear escuela de aprendices en los procesos de fabricación y técnicas de taller.
El 3 de junio de 1944 se institucionaliza a nivel estatal la Formación Profesional, creándose la Comisión Nacional de Aprendizaje y Orientación Profesional (CNAOP), dependiente del Ministerio de Trabajo y encargada de hacer un seguimiento de los distintos centros que formaban auxiliares y expertos en determinada rama del hacer. A partir de este hecho se institucionaliza el "Día del aprendiz" en este fecha.
El 15 de noviembre de 1959, ante la necesidad de unificar la conducción y supervisión de la enseñanza técnica y profesional, se creó el Consejo Nacional de Educación Técnica (CONET). Por este motivo es que en el día de la fecha festejamos el "Día Nacional de la Educación Técnica".
Sin embargo no todas fueron rosas. Durante los años '90 y con el advenimiento de las políticas neoliberales, la industria nacional sufrió un golpe de muerte. La invasión de productos importados y la desprotección a la que se vieron expuestas nuestras fábricas terminaron por cerrar la ecuación perversa: sin producción no hay necesidad de educación técnica.
En este contexto se promulga la "Ley Federal de Educación", la cual no contempla a la educación técnica entre las modalidades de la educación media.
Sólo tres distritos resistieron el embate: Río Negro, Neuquén y la Ciudad de Buenos Aires. Sólo en ellos se mantiene el título de "técnico".
Afortunadamente las cosas parecen ir cambiando, y a la floreciente reactivación industrial debemos sumarle un hecho trascendente: el miércoles 7 de septiembre del año 2005, la Honorable Cámara de Senadores sancionó la Ley de Educación Técnico Profesional, a partir del texto que obtuvo media sanción en la Cámara de Diputados. Días después, en el Salón Blanco de Casa de Gobierno, el Sr. Presidente de la Nación, Dr. Néstor Kirchner promulgó la misma.
Hagamos pues en este día, nuestras las palabras que publicara en 1849 Domingo Faustino Sarmiento, en su ecrito "De la Educación Popular":
Si la educación no prepara a las venideras generaciones para esta necesaria adaptación a los medios de trabajo, el resultado será la pobreza y la oscuridad nacional, en medio del desenvolvimiento de las otras naciones, que marchan con el auxilio combinado de tradiciones de ciencia e industria de largo tiempo, haciendo lentamente descender a las últimas condiciones de la sociedad a los que no se hallen preparados para la educación...".